junio 27, 2016

ARIEL BELTRAME: "A SCIOLI TODAVÍA NO LE PAGARON LA COCA"


El futsal se nutre de todos los que aportan su granito de arena. Las grandes figuras son importantes. Pero igual o acaso más, son aquellos personajes casi anónimos cuyo trabajo apasionado propicia que nuestra actividad goce de buena salud. Ariel Beltrame, técnico de las inferiores de La Ñata y coordinador de Rosario Futsal (LAFA) es una de esas personas que uno suele toparse en cualquier cancha, porque si bien se desenvuelve abnegadamente en sus respectivos clubes, su placer por el futsal lo conduce a diversos escenarios cuando sus horarios se lo permiten:
-Estoy contento por este presente -cuenta-. En La Ñata pasé de dirigir séptima, a hacerlo en cuarta, quinta y sexta luego de la ida de Ricardo Navarro, que se fue a vivir a La Rioja.  No me puedo quejar del lugar que tengo en el club. Aparte le estoy agradecido al Bicho Freire, que me deja participar con la primera. Quiero seguir aprendiendo ahí...
-¿Cómo notás el club?
-La Ñata está bien. Las cosas se fueron acomodando. A las inferiores se les da importancia. Falta que todos tomemos más conciencia que es un trabajo a largo plazo y que al ser esto AFA, incluso los entrenamientos deben ser muy competitivos.
-¿Cómo está el ánimo luego de las elecciones?
-La gente estaba esperando a ver qué iba a hacer Daniel (Scioli). Pero al ser éste un deporte que tanto le gusta, él sigue participando y aportando para el club.
-¿Lo ves habitualmente?
-En nuestros horarios, varias veces. Hace poco entrenó con nosotros en quinta. Apareció en una práctica y pidió jugar. Luego de coordinar el horario, hicimos un partido por la coca y ganó su cuarteto 9 a 1. Todavía no le pagaron.
-¿Tenés contacto con él?
-Sí... Nos saludamos, pregunta cómo van las cosas. Y no mucho más...
-¿Cómo te las arreglás con el viaje?
-Tengo una empresa de control de plagas y muchos de mis clientes están en Tigre. Los días que entreno, también voy para ese lado a trabajar. Tengo mi vehículo y trato de matar dos pájaros de un tiro. Ya veremos si alguna vez me podré dedicar sólo al futsal. Es lo que más quisiera.
-¿Qué es Rosario Futsal?
-Es el equipo de la parroquia Nuestra Señora del Rosario, de Villa Lynch. Ahí hago de todo. El año pasado dirigí y ahora estoy coordinando. Arrancamos en LAFA con tercera y primera y ahora ya tenemos hasta la sexta.  El año que viene, nos gustaría entrar en AFA. La cancha con medidas reglamentarias la tenemos. Faltaría un poco más de estructura. Veremos qué pasa...
-¿Qué opinás de LAFA?
-Me gusta porque reglamentariamente es igual a AFA y las primeras juegan en cancha grande. Después, siempre hay cosas para mejorar, a nivel liga y nosotros, los equipos.
-¿Cómo empezaste en el futsal?
-Doce años atrás yo daba fútbol para chicas y chicos en un merendero. Estábamos armando para jugar los Bonaerenses y vino alguien que dijo que en AFA se iniciaba el futsal femenino. Al año siguiente conseguimos el apoyo de Chacarita y entramos. A mí me empezó a gustar más esto que el fútbol. Más adelante, también en femenino, dirigí a Platense y AMUP. Esos dos fueron “piletazos” para seguir con la actividad. Como suele pasar, el tema se terminó disolviendo porque no contábamos con mucho apoyo de los clubes.  Yo estuve unos años alejado y volví en 2011, como ayudante de Alejandro Almeyra en la Municipalidad de Almirante Brown.
-¿Por qué no llegaste a completar el año?
-Hubo problemas y errores en el manejo del grupo, de mi parte y de la dirigencia. No nos poníamos de acuerdo con los delegados ni con otros técnicos. A mí me quedaba bastante lejos y era un esfuerzo muy grande para trabajar no tan cómodo. Decidí que lo más correcto era alejarme.
-¿Qué autocrítica hiciste?
-Siempre intento aprender de errores, propios y ajenos. El mío, fue querer imponer una forma de trabajo de un día para otro. No gradualmente. Aparte soy muy frontal y si algo me molesta lo digo enseguida. Y eso trae problemas.

No hay comentarios: